Luna

¿Cuantos de nosotros no hemos contemplado alguna vez la belleza y majestuosidad de la luna?
Aquella que cuando somos niños imaginamos que nos sigue a todos lados haciendonos sentir especiales por su compañia,
aquella que nos brinda su luminosidad en esa noche obscura,
aquella que brilla sin esperar nada a cambio,
aquella que nos relaja despues de un día tormentoso.
¿Cuantos hemos imaginado alguna vez trepar a esa luna y encontrar sus secretos?
 
Por todos aquellos que se han sentido alguna vez de esa manera le dejo el siguiente poema que encontré publicado en un periodico, solo que no encontré el nombre del autor, (para dar honor a quien honor merece).

 
Es la luna amiga mia
en ese camino de soledad
la única que de mi entorno
no se aleja jamás
 
La que invariablemente
le pide a sus amigas
las estrellas
que me hagan compañia
 
Hablando con ellas
no me alcanza tu ausencia
¿Donde quedo tu sonrisa?
¿Quien secará tu llanto?

Viví para amarte
y hacer de tus sueños
la única realidad
aún siendo solo un sueño
 
Mujer de ojos negros, de
profundo mirar, si ahora
eres feliz es el mejor
consuelo que me puedes dar.

Conveniencia

Hace días platicando con una gran amiga me preguntó: ¿Soy convenenciera?
 
Aquel día le respondí y ahora lo hago de nuevo...Si, por una razón, "todos somos convenencieros", en alguna medida o en alguna forma.
Tenemos amigos por conveniencia, y la conveniencia no es solo la de tipo monetario, a veces lo que buscamos en una amistad es entendimiento, consejo, apoyo, tiempo, entre otras cosas que sin darnos cuenta necesitamos.
 
Un amigo nos puede convenir por sus buenos consejos, por su entusiasmo, por su alegría, por sus notas escolares, por su simpatía, por sus ideas, por su sinceridad, y una larga lista de cualidades.
 
Un profesor(a) nos conviene por sus enseñanzas, por su disciplina, por su dedicación a la clase, por su dinamismo, por su presencia, etc.
 
Si nos remitimos al concepto de conveniencia hallamos que su significado es: "Correlación y conformidad entre dos cosas distintas. Utilidad. Provecho"
 
De tal forma que no hace alusión exclusiva al aspecto económico, sino que deja un amplio espectro para la conveniencia en todos los sentidos.
 
Generalmente los humanos hacemos las cosas por conveniencia de forma inconsciente, pero finalmente lo hacemos y terminamos siendo lo que negamos a veces de forma rotunda:
"Convenencieros"

Amanecer

Los procesos evolutivos son lentos pero finalmente son beneficos, muchas veces dentro del proceso parece que las cosas no tienen sentido o bien, los acontecimientos son tan pequeños que pasan desapercibidos, sin embargo una gota es capaz de romper la piedra más fuerte, claro está que la gota debe ser constante, así, los cambios resultan ser pequeños e imperceptibles.
 
Parezco estar en un letargo mientras el mundo gira constantemente, la humanidad se mueve pero sobre todo, mientras empiezo a cambiar.
 
Todo cambio inicia con la decisión de hacerlo, lo que realmente debe suceder en una transformación de este tipo es que el cambio debe ser para bien, sino, será solo una perdida de tiempo y por lo tanto una mala inversión.
 
Quien ha iniciado un proceso evolutivo (que obviamente involucra un cambio) sabrá que a veces las ciscunstancias por las que pasa no son las mejores y muchas veces siente deseos de abandonar la decisión, sin embargo, en este punto es bueno recordar que : "Mientras más negra está la noche, más cerca está de amanecer", y confiados es este podemos seguir esperando nuestro amanecer.

Enredarse con el primer alambre

Hace ya algun tiempo escuche la frase: "No te enredes con el primer alambre que encuentres"...y debo admitir que tiene razón, pues a menudo quien hace esto termina lamentandose, dado que hizo una mala elección, o lo que es más cierto, no se dio tiempo para decidir y las consecuencias son las lagrimas que corren por sus mejillas.

Ajedrez

La vida en su totalidad es impredecible y puesto que somos humanos nos vemos sometidos a ese juego de azar.
 
Vivimos de probabilidades y por ellas apostamos, muchas veces a sabiendas que lo que está en juego no es algo pequeño y las probabilidades de éxito son pequeñas.
 
Quizás esté hablando de forma personal (lógico, es mi blog)... debo decir en una apuesta que empezé he salido con resultados positivos pero a la vez negativos, al punto en que el juego (de la vida) quedó como antes de haber iniciado, con la diferencia de que ahora tendré que pensar en como recuperar la partida o bien, dejarme ganar y terminar, lo cual tampoco es sinonimo de rendición, sino de una nueva apuesta en este terreno de la vida.
 
Como en un tablero de ajedrez, a veces somos en la vida piezas que se mueven de manera impredecible, siempre con un propósito final: "Ganar"