martes, 24 de marzo de 2009

Inversion_confianza


Existe solo una forma en que una persona te puede decepcionar; ésta es: cuando confías plenamente en ella y piensas que todo será siempre igual.
 
 
Imagina que tienes un millón de pesos, ni uno más ni uno menos y existe un banco que ofrece las utilidades más altas en el mercado.
 



 
¿Que haces?
 
¿Inviertes todo a un plazo fijo o inviertes solo una parte?
 
Supongamos que tu decisión es invertir todo tu capital porque confías plenamente en el banco, pero después de un tiempo de altas ganancias el banco por alguna razón ajena a sus intereses quiebra llevándose detrás a todos sus clientes sin importar raza, género o nivel social. Con lo cual tú quedas en bancarrota sin dinero para subsistir pues recuerda que invertiste todo lo que tenías.
Finalmente, ¿Quien tendrá la culpa de que no tengas dinero ni siquiera para comer?
 
Ciertamente el banco tiene algo de culpa pero déjame decirte que parte de la culpa es tuya porque no imaginaste que algo semejante pudo haber pasado mientras confiabas con los ojos vendados.
 



 
La analogía quizás parezca fuera de lugar pero es muy cierta y solo intenta explicar una parte de lo que sucede con la mente del ser humano y su forma de percibir los errores ajenos y los propios que son los que más daño le causan.
 
 

miércoles, 11 de marzo de 2009

Promiscuidad


Probablemente suene algo puritano pero no importa si lo que digo es algo coherente y lógico, al menos en mi percepción de las cosas.
 
Ultimamente ha habido un bombardeo de spots televisivos de una marca de condones en especial... anunciar condones no es malo, de hecho estoy a favor del uso de ellos, lo que realmente sucede es que el bombardeo provoca cierta incitación por el consumo de dicho producto, pero mientras esto sucede, todos olvidan (más bien, la mayoría) que siempre existe una pequeña probabilidad de error, y esta ocurrencia puede desencadenar en enfermedades, embarazos no deseados y en el peor de los casos; abortos.
 
No son solo los spots, sino que aunados a las series televisivas, novelas rosas e influencias de mercadotécnia generan una fuerza tal, que las personas menos preparadas son las que están más expuestas y susceptibles a los efectos...que quiero decir con esto?...Fácil, las personas más expuestas a los efectos de la publicidad son los jovenes, y esta exposición puede facilmente derivar en promiscuidad, lo que a su vez generaría en degradación del ser humano.
 
La ley de Darwin sigue siendo válida, solo los más fuertes que se adapten se mantendrán en el ciclo de la vida, por ello la invitación es a prepararse mentalmente para afrontar todos los retos que esta sociedad moderna nos plantea...ahh y sí, elevar con ello la calidad humana.

Olvidar


Como olvidar en una semana lo que me ha tomado tiempo aprender y asimilar?.
 
Esta pregunta se ha convertido en los últimos días en algo que lejos de dejar de pensar me hace reforzarlo más. Es decir, lo que debo dejar de hacer es pensar...un poco quizás y dejarme guiar por los sentimientos.
Esto me resulta difícil y trato de evitar pensar en ello, pero cuando lo hago me doy cuenta que estoy haciendo precisamente eso, pensar, mientras que lo que debo hacer es...no hacerlo.
Ironico no?
"Pensar que debo hacer para no pensar"
 
Pensar se convirtió en una tarea intrinseca de mi persona, al grado que me aventuro a decir que soy solo pensamiento...bueno, no a tal grado, pero si puedo afirmar que detrás de cada acción mía hay una o más idéas y pensamientos.
 
Así pues, la acción "sentir" traerá detrás los pensamientos asociados respecto a si es bueno y que medida lo es...obvio, debe ser bueno y mucho.
 
Solo debo dejarme guiar un poco por ellos.

viernes, 6 de marzo de 2009

Espera...


Este post lo inicio con una pregunta que me he hecho en varias ocasiones y que a través del tiempo me he dado cuenta que no soy el único que se lo ha preguntado.
Ási que la pregunta es:
 

Espera ¿Que tiempo es el apropiado para la espera?


Una hora, un día, un mes, un año, más?
Todo es relativo, la espera es recompensada en la medida en que se esperó, considero, es decir, si espero mucho tiempo tengo la posibilidad de recibir más, en constraste a si hubiese esperado poco.
 
Pero...por que esperar?, acaso estoy seguro de cual será la recompensa?, acaso sé lo que el destino me tiene preparado?
 
No lo sé, podría ser tan fácil como evitar la espera y tomar lo que quiera cuando quiera, y donde quiera, pero...tiene esto algún merito?
 
Si tomo lo que quiera sin esperar, cuanto puede ser?...no es esto un sinonimo que mi recompensa será insignificante?
Si las ganacias insignificantes las sumo, podrían dar un resultado semejante al de una espera larga?.
Probablemente no lo sean, quizás sucede lo mismo que las inversiones en los bancos, plazos mayores de tiempo generan mayores utilidades y es lo que de álguna forma consciente e inconsciente he estado haciendo, he estado invirtiendo mi espera y mi tiempo con el objetivo implícito de obtener mayores ganancias, no económicas, pero si espirituales, pisicológicas y emocionales.

Paisaje